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Tres jóvenes se presentan ante Jeralt y su grupo de mercenarios en Remire pidiendo auxilio porque unos bandidos les están dando caza. Jeralt decide intervenir para ayudarles a plantar batalla y defender el pueblo.

Para sorpresa generalizada, un joven mercenario/una joven mercenaria ha sido elegido/elegida para dar clase en la Academia de Oficiales. Todos sienten curiosidad por ver qué será capaz de hacer en el simulacro de batalla que enfrenta a las tres clases.

Los alumnos reciben su primera misión poco después del simulacro: deben acompañar a los Caballeros de Seiros al Cañón Rojo de Zanado para ayudarlos a acabar con un grupo de bandidos en lo que será su bautismo de fuego.

La clase de Byleth debe ayudar a los Caballeros, que van a sofocar la rebelión de lord Lonato en el castillo de Gaspard. No se prevé que el alumnado entre en batalla, pero la niebla del camino de Magdred resulta inquietante.

El monasterio está alterado tras salir a la luz un plan para atentar contra la Arzobispa en la Ceremonia del Renacer. Sin embargo, los estudiantes sospechan que podría ser una distracción e indagan el verdadero objetivo del enemigo.

El hijo desheredado de la Casa Gautier ha robado la reliquia de los héroes de su familia y está sembrando el caos con un grupo de bandidos. La Iglesia encarga a los estudiantes que acaben con ellos y restauren la paz.

Los habitantes del monasterio están horrorizados tras conocer que Flayn, la hermana de Seteth, ha desaparecido. Los estudiantes y Byleth buscan por todos lados sin éxito, hasta que dan con la pista correcta...

Las tres casas se enfrentan en la tradicional batalla de los Leones y las Águilas, una contienda a tres bandas que conmemora un episodio de la historia y que se celebra en los campos de Gronder, territorio del Imperio.

Los incidentes que afectan a Remire parecen haber tomado tintes preocupantes. Byleth y su clase deben ir a investigar qué sucede.

Jeralt, Byleth y sus estudiantes deben investigar una capilla abandonada de Garreg Mach.

Byleth y sus estudiantes se dirigen al Bosque Vedado para vengar la muerte de Jeralt.

El grupo acude al Sagrado Sepulcro, en lo más profundo de Garreg Mach, para recibir una revelación de la Diosa. En ese lugar recóndito, de cuya existencia saben solo unos pocos, descubrirán una verdad inimaginable.

El ejército del Imperio, con Edelgard a la cabeza, se dirige a Garreg Mach. Tras conocer la noticia, los habitantes del monasterio se preparan para una batalla que podría ser la antesala de una guerra nefasta...

Han pasado cinco años desde la batalla de Garreg Mach. El monasterio se encuentra abandonado y en manos de unos bandidos. Incapaces de soportar esta infamia por más tiempo, dos valientes se adentran en el recinto.

Cumpliendo la promesa que hicieron cinco años antes, los antiguos alumnos acuden al monasterio. Sin embargo, apenas tienen tiempo para celebraciones.

El grupo se dirige a Ailell, el Valle del Tormento, para encontrarse con tropas de refuerzo. A priori, parece ser una misión sencilla...

Tras detener el avance del Imperio, el grupo decide pasar a la ofensiva. Para ello deben capturar el Gran Puente de Myrddin, un punto estratégico que permite cruzar el río Airmid, que separa al Imperio de la Alianza.

El grupo pone rumbo al sur para llegar a Enbarr, la capital imperial, pero en su camino se interpone Fuerte Merceus, plaza que tiene fama de inexpugnable. Para capturar la fortaleza hará falta un muy buen plan...

Dada su inferioridad numérica, el grupo concluye que el único modo de vencer al Imperio es una acción rápida. Así pues, se dirige a Enbarr, la capital imperial, para infiltrarse y atacar por sorpresa.

Tras superar las defensas de Enbarr, el grupo se dirige sin dilación al palacio imperial para derrotar a Edelgard, poner fin a las hostilidades y, por último, encontrar a Rhea, cuyo paradero sigue siendo un misterio.

Las llamas de la guerra se extinguen, pero aún quedan peligrosos rescoldos: el grupo se dirige al inframundo para derrotar a las Serpientes de las Tinieblas y restaurar, de una vez por todas, la paz en Fódlan.

La caída de Shambhala pone fin a cinco años de guerra y abre una nueva era de paz. Al borde de la muerte, Rhea llama al comandante/a la comandante del ejército de la resistencia para cederle el testigo. Pero algo no va bien...

Tres jóvenes se presentan ante Jeralt y su grupo de mercenarios en Remire pidiendo auxilio porque unos bandidos les están dando caza. Jeralt decide intervenir para ayudarles a plantar batalla y defender el pueblo.

Para sorpresa generalizada, un joven mercenario/una joven mercenaria ha sido elegido/elegida para dar clase en la Academia de Oficiales. Todos sienten curiosidad por ver qué será capaz de hacer en el simulacro de batalla que enfrenta a las tres clases.

Los alumnos reciben su primera misión poco después del simulacro: deben acompañar a los Caballeros de Seiros al Cañón Rojo de Zanado para ayudarlos a acabar con un grupo de bandidos en lo que será su bautismo de fuego.

La clase de Byleth debe ayudar a los Caballeros, que van a sofocar la rebelión de lord Lonato en el castillo de Gaspard. No se prevé que el alumnado entre en batalla, pero la niebla del camino de Magdred resulta inquietante.

El monasterio está alterado tras salir a la luz un plan para atentar contra la Arzobispa en la Ceremonia del Renacer. Sin embargo, los estudiantes sospechan que podría ser una distracción e indagan el verdadero objetivo del enemigo.

El hijo desheredado de la Casa Gautier ha robado la reliquia de los héroes de su familia y está sembrando el caos con un grupo de bandidos. La Iglesia encarga a los estudiantes que acaben con ellos y restauren la paz.

Los habitantes del monasterio están horrorizados tras conocer que Flayn, la hermana de Seteth, ha desaparecido. Los estudiantes y Byleth buscan por todos lados sin éxito, hasta que dan con la pista correcta...

Las tres casas se enfrentan en la tradicional batalla de los Leones y las Águilas, una contienda a tres bandas que conmemora un episodio de la historia y que se celebra en los campos de Gronder, territorio del Imperio.

Los incidentes que afectan a Remire parecen haber tomado tintes preocupantes. Byleth y su clase deben ir a investigar qué sucede.

Jeralt, Byleth y sus estudiantes deben investigar una capilla abandonada de Garreg Mach.

Byleth y sus estudiantes se dirigen al Bosque Vedado para vengar la muerte de Jeralt.

El grupo acude al Sagrado Sepulcro, en lo más profundo de Garreg Mach, para recibir una revelación de la Diosa. En ese lugar recóndito, de cuya existencia saben solo unos pocos, descubrirán una verdad inimaginable.

El ejército del Imperio, con Edelgard a la cabeza, se dirige a Garreg Mach. Tras conocer la noticia, los habitantes del monasterio se preparan para una batalla que podría ser la antesala de una guerra nefasta...

Han pasado cinco años desde la batalla de Garreg Mach. El monasterio se encuentra abandonado y en manos de unos bandidos. Incapaces de soportar esta infamia por más tiempo, dos valientes se adentran en el recinto.

Cumpliendo la promesa que hicieron cinco años antes, los antiguos alumnos acuden al monasterio. Sin embargo, apenas tienen tiempo para celebraciones.

El grupo se dirige a Ailell, el Valle del Tormento, para encontrarse con tropas de refuerzo. A priori, parece ser una misión sencilla...

Tras detener el avance del Imperio, el grupo decide pasar a la ofensiva. Para ello deben capturar el Gran Puente de Myrddin, un punto estratégico que permite cruzar el río Airmid, que separa al Imperio de la Alianza.

Los antiguos delegados de las tres clases se reúnen otra vez en los campos de Gronder, el escenario de la batalla de los Leones y las Águilas, para librar una contienda —real en esta ocasión— que enfrenta a Imperio, Reino y Alianza.

La muerte de Rodrigue obliga a Dimitri a reconsiderar sus planes: por el bien de su pueblo, decide postergar la invasión del Imperio y centrar sus esfuerzos en liberar Fhirdiad, la capital del Reino.

Tras recuperar la capital del Reino, llega una llamada de auxilio de Claude. Derdriu, la capital de las aguas, está a punto de caer y necesita refuerzos urgentemente.

Tras salvar a la Alianza, el grupo reorganiza sus tropas e inicia la marcha hacia el sur para penetrar en el territorio del Imperio. Alcanzar Enbarr, eso sí, pasa por conquistar Fuerte Merceus, plaza que tiene fama de inexpugnable.

Tras tomar Fuerte Merceus, el grupo se dirige a Enbarr, la capital del Imperio. El ejército imperial ha desplegado sus tropas por las calles y se ha conjurado para resistir hasta el final, pase lo que pase.

Tras abrirse paso entre las calles de Enbarr, el grupo pone rumbo al palacio imperial. El momento de la confrontación entre Edelgard y Dimitri ha llegado al fin.

Tres jóvenes se presentan ante Jeralt y su grupo de mercenarios en Remire pidiendo auxilio porque unos bandidos les están dando caza. Jeralt decide intervenir para ayudarles a plantar batalla y defender el pueblo.

Para sorpresa generalizada, un joven mercenario/una joven mercenaria ha sido elegido/elegida para dar clase en la Academia de Oficiales. Todos sienten curiosidad por ver qué será capaz de hacer en el simulacro de batalla que enfrenta a las tres clases.

Los alumnos reciben su primera misión poco después del simulacro: deben acompañar a los Caballeros de Seiros al Cañón Rojo de Zanado para ayudarlos a acabar con un grupo de bandidos en lo que será su bautismo de fuego.

La clase de Byleth debe ayudar a los Caballeros, que van a sofocar la rebelión de lord Lonato en el castillo de Gaspard. No se prevé que el alumnado entre en batalla, pero la niebla del camino de Magdred resulta inquietante.

El monasterio está alterado tras salir a la luz un plan para atentar contra la Arzobispa en la Ceremonia del Renacer. Sin embargo, los estudiantes sospechan que podría ser una distracción e indagan el verdadero objetivo del enemigo.

El hijo desheredado de la Casa Gautier ha robado la reliquia de los héroes de su familia y está sembrando el caos con un grupo de bandidos. La Iglesia encarga a los estudiantes que acaben con ellos y restauren la paz.

Los habitantes del monasterio están horrorizados tras conocer que Flayn, la hermana de Seteth, ha desaparecido. Los estudiantes y Byleth buscan por todos lados sin éxito, hasta que dan con la pista correcta...

Las tres casas se enfrentan en la tradicional batalla de los Leones y las Águilas, una contienda a tres bandas que conmemora un episodio de la historia y que se celebra en los campos de Gronder, territorio del Imperio.

Los incidentes que afectan a Remire parecen haber tomado tintes preocupantes. Byleth y su clase deben ir a investigar qué sucede.

Jeralt, Byleth y sus estudiantes deben investigar una capilla abandonada de Garreg Mach.

Byleth y sus estudiantes se dirigen al Bosque Vedado para vengar la muerte de Jeralt.

El grupo acude al Sagrado Sepulcro, en lo más profundo de Garreg Mach, para recibir una revelación de la Diosa. En ese lugar recóndito, de cuya existencia saben solo unos pocos, descubrirán una verdad inimaginable.

El ejército del Imperio, con Edelgard a la cabeza, se dirige a Garreg Mach. Tras conocer la noticia, los habitantes del monasterio se preparan para una batalla que podría ser la antesala de una guerra nefasta...

Han pasado cinco años desde la batalla de Garreg Mach. El monasterio se encuentra abandonado y en manos de unos bandidos. Incapaces de soportar esta infamia por más tiempo, dos valientes se adentran en el recinto.

Cumpliendo la promesa que hicieron cinco años antes, los antiguos alumnos acuden al monasterio. Sin embargo, apenas tienen tiempo para celebraciones.

El grupo se dirige a Ailell, el Valle del Tormento, para encontrarse con tropas de refuerzo. A priori, parece ser una misión sencilla...

Tras detener el avance del Imperio, el grupo decide pasar a la ofensiva. Para ello deben capturar el Gran Puente de Myrddin, un punto estratégico que permite cruzar el río Airmid, que separa al Imperio de la Alianza.

Los antiguos delegados de las tres clases se reúnen otra vez en los campos de Gronder, el escenario de la batalla de los Leones y las Águilas, para librar una contienda —real en esta ocasión— que enfrenta a Imperio, Reino y Alianza.

El grupo pone rumbo al sur para llegar a Enbarr, la capital imperial, pero en su camino se interpone Fuerte Merceus, plaza que tiene fama de inexpugnable. Para capturar la fortaleza hará falta un muy buen plan...

Dada su inferioridad numérica, el grupo concluye que el único modo de vencer al Imperio es una acción rápida. Así pues, se dirige a Enbarr, la capital imperial, para infiltrarse y atacar por sorpresa.

Tras superar las defensas de Enbarr, el grupo se dirige sin dilación al palacio imperial para derrotar a Edelgard, poner fin a las hostilidades y, por último, encontrar a Rhea, cuyo paradero sigue siendo un misterio.

Las llamas de la guerra se extinguen, pero aún quedan peligrosos rescoldos: el grupo se dirige al inframundo para derrotar a las Serpientes de las Tinieblas y restaurar, de una vez por todas, la paz en Fódlan.

Shambhala ha caído, pero entre las ruinas aparece por sorpresa un ejército misterioso que enarbola el estandarte del emblema de fuego y que comanda Némesis, el Rey Cruel, supuestamente muerto desde hace un milenio...