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Byleth, Alois enter the scene
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Alois
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¡Anda, profesor/ora! ¿Qué te trae por aquí? ¿Te apetecía pescar?
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Alois
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¿Querías que te ayudase en algo? Ah, no. No es eso lo que veo en tu mirada...
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Alois
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¿Sabes qué? Siempre que voy de pesca me cuesta mucho no pensar en el viejo Jeralt.
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Alois
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Los dos veníamos aquí a sentarnos y nos pasábamos el rato lanzando el anzuelo.
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Alois
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¡Y aún no he mejorado nada desde entonces! No he conseguido que piquen ni una sola vez.
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Alois
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De tal palo, tal astilla, ¿eh? Te conoces todos los trucos de la pesca.
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Alois
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De tal palo, tal astilla, ¿eh? Tu padre me decía siempre lo mismo.
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Alois
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A mí se me daba de pena, pero él era todo un experto.
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Alois
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En lo que tardaba yo en pescar un pez, él llenaba la cesta hasta los topes.
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Alois
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¿Sabes? Al hablar contigo me invade la nostalgia.
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Alois
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¿Por qué no pescas conmigo? Podemos compartir historias sobre Jeralt.
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Alois
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Ya habíamos comentado que Jeralt no envejecía nunca, ¿verdad?
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Alois
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Una vez, cuando estaba borracho, me reveló su secreto.
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Alois
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Me contó que había tomado una infusión hecha con sangre de alguien que portaba un emblema, y que le había otorgado una gran longevidad.
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Alois
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Los dos habíamos bebido, así que me imaginé que lo decía de broma y me limité a reírme.
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Alois
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Luego le pregunté qué edad tenía y me dijo que había parado de contar cuando llegó a 100.
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Alois
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¡Y decía la verdad! Se pasó 20 años fuera y no envejeció ni un solo día.
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Alois
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Qué persona tan increíble... Y eso que no sabré ni la mitad de las historias, seguro.
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Alois
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En realidad, quisiera preguntarte algo sobre Jeralt, si no te importa.
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Alois
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¿Cómo era Jeralt cuando no estaba en el monasterio?
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Alois
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Es decir: ¡era exactamente igual!
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Alois
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Cuando estaba en la orden, siempre sacaba tiempo para irse de pesca. Digamos que... ¡le picaba el gusanillo!
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Alois
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Decía que no había mayor placer en esta vida que hincarle el diente a un pez que él mismo había pescado. ¡Y regarlo con algo de beber!
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Alois
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Es decir: ¡era exactamente igual!
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Alois
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Cuando era su escudero, se pasaba todo el tiempo gritando que necesitaba beber algo. Supongo que no se daba cuenta de que... me hacía pasar un mal trago.
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Alois
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Pero en el campo de batalla no tenía rival; por eso lo apodaban «el Quiebraespadas».
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Alois
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Debo admitir que estar aquí pescando contigo me trae muchos recuerdos.
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Alois
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Me siento como en los viejos tiempos, cuando era Jeralt quien se sentaba a mi lado.