Edelgard & Ferdinand C

Ferdinand
Llegas en el momento oportuno, Edelgard.

Edelgard
No me digas.

Ferdinand
Hay una historia de la que me gustaría hablarte; quizá la conozcas ya.

Ferdinand
Trata sobre un par de nobles que vivieron unos cien años después de fundarse el Imperio adrestiano.

Ferdinand
Uno era Derick von Aegir. Se ganó el apodo de «Primer Ministro Guerrero», por liderar a sus soldados en combate y aniquilar al enemigo.

Ferdinand
Y la otra persona era...

Edelgard
la emperatriz de la época, quien se batió en duelo por el trono con Derick y se alzó con la victoria.

Edelgard
«¡Podríamos imitar a nuestros antepasados y librar un duelo entre nosotros!»

Edelgard
Seguro que estabas pensando eso, ¿eh? Pues yo no estoy por la labor.

Ferdinand
¡Me has interrumpido!

Ferdinand
Iba a decir que el Primer Ministro Guerrero dejó una cita para la historia al proponer el duelo, y tú ni siquiera me has dejado pronunciarla.

Edelgard
Cuánto lo siento, Ferdinand.

Ferdinand
En todo caso, has estado muy aguda al darte cuenta de que quería retarte a un duelo.

Ferdinand
Lástima que hayas rechazado mi oferta tan a la ligera.

Edelgard
Basta, Ferdinand. ¿Es que nunca vas a dejar de desafiarme a duelos sin sentido?

Ferdinand
Está bien. Ya que insistes, no volveré a hacerlo.

Edelgard
¿Y esperas que me lo crea?

Ferdinand
No te finjas sorprendida. Obviamente, para que haya un duelo tiene que existir voluntad en las dos partes implicadas.

Ferdinand
Dado que tú te has negado, tendré que hallar otro modo de procurarme lo que quiero.

Edelgard
Miedo me da preguntar a qué te refieres...

Ferdinand
A encontrar otra forma de demostrarle a todo el mundo que soy mejor que tú.

Ferdinand
Elaboraré una lista con todas tus hazañas y luego añadiré las mías, aún más impresionantes.

Ferdinand
Cuando termine, ordenaré que se hagan miles de copias del panfleto para distribuirlas a lo largo y ancho del mundo. Así quedará todo más que claro.

Edelgard
Debo poner fin a todo esto... Tal vez acabaríamos antes si nos batiéramos en duelo.