Hubert & Ferdinand C

Ferdinand
(En cuanto todos vean esto, se darán cuenta de que soy mucho mejor que Edelgard.)

Hubert
Otra vez con lo mismo...

Ferdinand
¡Hubert! Te agradecería que no aparecieras sin avisar.

Hubert
Quizá estarías más atento a lo que te rodea si no estuvieras tan absorto tramando la sedición.

Ferdinand
¿Sedición? Te haré saber que es un proyecto de la mayor importancia.

Hubert
Ya lo he oído. Quieres demostrar tu superioridad sobre lady Edelgard.

Hubert
No eres rival para ella. Está por encima de ti.

Hubert
Un noble que se precie debería conocer el lugar que le corresponde.

Ferdinand
Cualquier cosa es mejor que ser un noble como tú.

Ferdinand
Cada vez que abres la boca, solo es para decir «Edelgard esto, Edelgard lo otro»... ¿Es que no puedes pensar por ti mismo?

Ferdinand
La sigues como un perrillo faldero. Solo te preocupas por ella, hasta el punto de que eres incapaz de tener una opinión propia.

Ferdinand
Antes de sermonearme, más te valdría que analizaras tu propio comportamiento.

Hubert
Tus disparates ya cansan, espero que esta sea la última vez que te lo digo.

Ferdinand
Lo sé de sobra. Mas es mi deber guiarla mediante consejos sinceros cuando se equivoca.

Ferdinand
Ese es mi empeño, siempre.

Ferdinand
De hecho, es el motivo por el que ansío superar a Edelgard. Para poder aconsejarla si necesita una guía.

Ferdinand
Si consideras que formarse opiniones propias es «cansino», nunca serás un buen consejero.

Hubert
¿Cuándo dejará de salir ponzoña de tu boca?

Hubert
Tu obsesión con las apariencias es enfermiza.

Hubert
No tiene sentido razonar contigo. Mejor será que me marche.

Ferdinand
No tengo nada más que hablar contigo. Sal de aquí.