Tempestad de escudos y espadas

Acabar con el Reino pasa por hundir primero a la Alianza. No hay tiempo que perder...

Si nos invade la duda, perderemos la iniciativa.

Pero deberíamos dejar descansar a las tropas. De lo contrario, su moral se resentirá.

Y procuremos mantener este asunto en secreto, ¿entendido? Si alguien se entera, no te lo perdonaré.

Claude von Riegan. Un tipo muy interesante.

Bajo esa fachada compasiva siempre ha sido un hombre frío y calculador.

Solo un idiota se lanzaría de cabeza al combate sin siquiera considerar la posibilidad de la derrota.

La inteligencia se demuestra cuando anticipas lo que puede salir mal y te preparas para ello.

He de decir que, en ese sentido, estoy bastante impresionado.

Gracias al apoyo de la mayoría, este conflicto pronto será historia. Me ha conmovido la decisión adoptada por parte de la aristocracia de la Alianza.

Han mostrado auténtica nobleza al tener en cuenta los deseos y necesidades del pueblo.

Mientras perdure la guerra, quienes viven cerca del frente se llevan inevitablemente la peor parte.

Sin embargo, dudo que en Faerghus se adopte una resolución pacífica, pues no gobierna un consejo de nobles, sino la familia real.

El Mausoleo Sagrado me parece un lugar fascinante.

Hay un mecanismo que, según creo, permite adentrarse en el Sagrado Sepulcro, pero no alcanzo a comprender cómo funciona.

Mis investigaciones tampoco han arrojado demasiada luz al respecto. Quizá sea cuestión de preguntarle a la Arzobispa directamente.

En efecto. Veremos si las molestias valen la pena.

¿Viste a mi padre en Derdriu?

Parece que su misión es controlar el territorio de Riegan sin perder el apoyo del pueblo.

Aunque no sé si entiendo bien lo que eso significa.

La guerra no es fácil para una ermitaña como yo.

Cuando te has enterado de que te atacan, ya es demasiado tarde.

Y, si estás sola, puedes acabar muerta sin que nadie se entere nunca.

Al menos me ha hecho salir de mi cuarto. Ese es el lado bueno, ¿no?

La Alianza de Leicester ya no existe. Trescientos años de historia... se han desvanecido como si nada.

Se escriben óperas sobre estos sucesos, ¿sabes?

Reino es demasiado frío. A mí no gusta nada.

Brigid no tan frío. Espíritus nuestros espantan heladas.

¿Diosa de Fódlan no protege contra frío? Ojalá yo podría preguntar a ella.

Mi padre defiende Arianrhod.

Y nuestra próxima batalla será allí, contra él, o en Fhirdiad, que está bajo la protección del rey.

Derdriu ha caído y los nobles de la Alianza se han rendido ante el Imperio.

Nuestras bajas han sido mínimas. No nos podemos quejar...

Pero dudo que lidiar con Faerghus vaya a ser tan fácil.

Después de Leicester viene Faerghus, ¿no? Eso no será nada fácil...

Oye, profe... ¿Por qué luchar contra Faerghus? ¿No existe algún modo con el que podamos llegar a un entendimiento?

Es horrible tener que pensar en matar a gente a la que me unían tantas cosas.

Aunque supongo que todo el mundo se siente igual.

Oh, Claude... ¡Cómo me alivia saber que sigue con vida!

Ahora te dispones a luchar contra el Reino, ¿verdad? ¿Y luego, contra la Iglesia?

¿Existe algún modo de hacerlo sin tener que enfrentarse a Dimitri ni a lady Rhea? Imagino que no...

Oh, Claude... Ya es demasiado tarde. Qué pérdida tan trágica...

Ahora te dispones a luchar contra el Reino, ¿verdad? ¿Y luego, contra la Iglesia?

Supongo que Edelgard no dudará en matar a Dimitri y a lady Rhea...

Es posible que estemos asistiendo a un momento histórico.

Tu nombre y el de Edelgard seguirán en los libros de historia dentro de cientos de años, maestro/a.

Me pregunto quién decidirá si hicimos o no lo correcto...

Bueno, de todas formas, no seremos nosotros. La gente del futuro, supongo.

La lucha contra la Alianza ha acabado, pero no debemos dormirnos en los laureles.

No debemos subestimar a la Iglesia ni al Reino. Más pronto que tarde, atraeremos su atención.

Haríamos bien en seguir practicando y no dejar de preparar nuestras armas.

Parece que la afamada astucia de Claude no era para tanto.

Un estratega sensato se habría percatado de la inevitable derrota y se habría rendido.

O, en todo caso, habría unido a los nobles de la Alianza para tener opciones reales de victoria.

Lamento no poder decírselo, aunque supongo que un hombre como él no permanecerá oculto mucho tiempo.

Parece que la afamada astucia de Claude no era para tanto.

Un estratega sensato se habría percatado de la inevitable derrota y se habría rendido.

O, en todo caso, habría unido a los nobles de la Alianza para tener opciones reales de victoria.

Lo único que lamento es que ya no tendré la ocasión de decírselo nunca.

Como yo no tengo sangre noble, me tiene sin cuidado...

pero aún no me creo que la Alianza esté acabada.

¿Dónde andará Claude ahora mismo? ¿Y qué estará maquinando?

Como yo no tengo sangre noble, me tiene sin cuidado...

pero aún no me creo que la Alianza esté acabada.

Tampoco me ha afectado la muerte de Claude.

Conociéndolo, no me extrañaría que hubiera fingido su muerte y esté esperando la ocasión para agarrarnos por sorpresa.

No puedo creer que haya sido testigo de la caída de la Alianza de Leicester.

He visto un momento histórico con mis propios ojos. Y se trata del país donde nací; no sé cómo expresar mis sentimientos.

Así, nuestro triunfo pasará a la posteridad.

La batalla ha concluido sin que la Casa Ordelia se viera involucrada.

A pesar de todo, no deseo heredar el mando de mi familia. A partir de ahora, lo dejo todo en manos de Edelgard.

Hay que agradecérselo a Claude.

De este modo, al menos, conseguimos que no toda la Alianza fuera consumida por las llamas de la guerra. Y se lo debemos a Claude.

Hay que agradecérselo a Claude.

Antes de la batalla, y al respecto de nuestra precaria situación, dijo que no le importaría que los Ordelia nos aliásemos con el Imperio.

Así que, cuando me invitaste, acepté sin dudarlo.

De este modo, al menos, conseguimos que no toda la Alianza fuera consumida por las llamas de la guerra. Y se lo debemos a Claude.

Estaba pensando...

¿No había otra solución que no implicase luchar con Claude?

Supongo que rezar es lo único que puedo hacer ahora por él.

Que sea feliz el resto de sus días.

Estaba pensando...

¿No había otra solución que no implicase luchar con Claude?

Supongo que rezar es lo único que puedo hacer ahora por él.

Que descanse en paz.

Lo peor de una batalla es saber que puedes encontrarte con un amigo en el otro bando.

Profe, tú que fuiste mercenario/a, ¿te sentías preparado/a para algo así?

No hay nada peor que luchar contra viejos amigos. Me tiemblan las manos solo de pensarlo.

Me alegro de que Claude no muriera... ¿He de considerarme una blandengue por eso?

Lo peor de una batalla es saber que puedes encontrarte con un amigo en el otro bando.

Profe, tú que fuiste mercenario/a, ¿te sentías preparado/a para algo así?

No hay nada peor que luchar contra viejos amigos. Me tiemblan las manos solo de pensarlo.

No quería que Claude muriera... ¿He de considerarme una blandengue por eso?

No... al menos, eso creo. Hay otros emblemas menores en los que puedo centrarme.

Pero hablaba como ser humano, y no como académico. Ahora es el momento de llorar por los caídos y rezar por los que siguen vivos.

Claude ha caído... Diosa, ¿significará esto el final de la Casa Riegan?

Su emblema es más común que otros, ciertamente, pero...

el ancestral linaje de la familia Riegan podría romperse definitivamente.

Parece que Claude ha desaparecido... ¿Crees que esto es el fin de la Casa Riegan?

Su emblema es más común que otros, ciertamente, pero...

el ancestral linaje de la familia Riegan podría romperse definitivamente.

Su emblema es más común que otros, ciertamente, pero...

el ancestral linaje de la familia Riegan podría romperse definitivamente.

Sabes perfectamente que pronto tendremos que enfrentarnos a la Arzobispa y sus Caballeros.

Contamos con grandes guerreros, sí... pero, a pesar de tanta enseñanza, no sé si llevamos las de ganar.

No sé cómo vamos a plantar cara a la Arzobispa si es capaz de transformarse en una enorme bestia.

Sabes perfectamente que pronto tendremos que enfrentarnos a la Arzobispa y sus Caballeros.

Contamos con grandes guerreros, sí... pero, a pesar de tanta enseñanza, no sé si llevamos las de ganar.

No sé cómo vamos a plantar cara a la Arzobispa si es capaz de transformarse en una enorme bestia.

He vivido ya algunas décadas en el monasterio de Garreg Mach.

¡Pero el otro día me quedé boquiabierto! Tiene tantas estancias secretas y pasajes ocultos...

Quizá dedique algo de mi tiempo a explorar adecuadamente todo este sitio.

¿Te gustaría acompañarme? Calculo que tardaríamos un día entero.

Eres demasiado blando/a. Estamos hablando de Claude.

Nuestra emperatriz aplasta sin piedad a todo aquel que ose interponerse en su camino...

Aunque puede que sea más tolerante con aquellos que saben cuál es su lugar.

Nuestra emperatriz aplasta sin piedad a todo aquel que ose interponerse en su camino...

Aunque se trate del As de la Estrategia.

Por fin nos vamos a enfrentar al Reino... Después llegará el turno de la Iglesia.

Si me ofrecí voluntario para proteger el monasterio, fue más por mi familia que por otra cosa...

Pero ahora deseo con todo el corazón que su majestad gobierne en este país.

Así me cueste la vida, ¡defenderé Garreg Mach!

Yo solo pretendía ayudar a mi hermano, Randolph... Por eso quería convertirme en soldado.

Él arriesga su vida en el frente, así que yo también debo hacerlo.

Sé que el enemigo atacará tarde o temprano, ¡y aquí estaré yo para defender este lugar hasta el fin!

Sus próximos oponentes serán las tropas del Reino y los Caballeros de Seiros... Unos rivales de temer.

Deberían aprovechar la movilidad de mis soldados; nos encargaremos de proteger el flanco oeste.

Cuando acabe el mes, partiré. Espero que se alcen con la victoria.

¡Saludos, profesor/sora! ¡Sin novedad en el puesto!

Supongo que ya lo sabrás, pero hace mucho tiempo el Reino y la Alianza eran un único país.

Los líderes de la Alianza, la Casa Riegan, son una rama de los Blaiddyd, la familia real.

Podría decirse que estamos en guerra con la parte de la familia Blaiddyd que se rebeló contra el Imperio...

Las cosas que no llegan aquí muchas veces pueden obtenerse bajo tierra, por increíble que parezca.

¿No conoces el subsuelo de Garreg Mach? Te aseguro que es un paraíso para quienes no pueden vivir en la superficie...

Esa gentuza del Abismo no hace más que causarnos problemas.

Son una plaga que asuela las entrañas de Garreg Mach... Deberíamos hacer una purga.

No parece haber demasiado alboroto en los antiguos dominios de la Alianza. Creo que la mano dura del conde de Bergliez tiene mucho que ver.

Dicho esto, el general Randolph es el cabeza de una de las ramas de la familia Bergliez.

Antaño, quien no pertenecía al núcleo principal de una casa tenía muchas puertas cerradas, pero con su majestad...

¡las hazañas del campo de batalla serán recompensadas con todos los honores imaginables!

El grueso del ejército imperial va camino de la región occidental de los antiguos dominios de la Alianza para atacar el Reino.

Presiento que se acerca el momento decisivo de la guerra con Faerghus.

Garreg Mach es, con diferencia, el lugar sagrado más importante para la Iglesia de Seiros.

Los Caballeros de Seiros tratarán de recuperarlo por todos los medios.

Dudo que permanezcan mucho más tiempo en la capital del Reino. Debemos estar atentos.

La general Ladislava goza de una gran reputación entre la ciudadanía del Imperio.

Si la memoria no me falla, ha sido la mismísima emperatriz quien la ha nombrado general en reconocimiento por su audacia.

Pese a su enorme talento, jamás la he visto alardear. Y, para colmo, es muy hermosa.

He oído que la apodan «la Guerrera Escarlata».

El rey Dimitri de Faerghus posee una fuerza sobrehumana.

Tengo entendido que es capaz de levantar un caballo en peso. ¡Con una mano! Habría que ver si es cierto.

Lord Rodrigue, el encargado de defender Arianrhod, recibe el sobrenombre de Escudo de Faerghus.

Tenía una buena relación con el padre de Dimitri, el antiguo rey. No existe ninguna posibilidad de que se rinda.

A lo mejor ya lo sabías, pero las tierras de Faerghus pertenecían antes al Imperio.

Tras la batalla de Tailtean, en la que Némesis cayó derrotado, Faerghus quedó bajo control imperial.

Siglos después estalló una revolución en la región. Gracias a la mediación de la Iglesia, el Reino obtuvo la independencia.

El cabecilla de la insurrección se convirtió en su primer monarca: Loog von Blaiddyd.

Los Blaiddyd, la familia real, son descendientes directos de Loog, más conocido como el Rey de los Leones.

Desde el punto de vista del Imperio, el Reino no es más que una nación de traidores.

Randolph tiene buen apetito; da gusto verlo comer. Y, encima, está hecho un galán.

A su lado, Hubert... Bueno, mejor no sigo.

Me ha sorprendido lo rápido que la caída de Derdriu ha hecho que se rinda la Alianza.

Lo ideal sería doblegar al Reino del mismo modo, pero algo me dice que no será tarea fácil.

Ahora es necesaria la máxima concentración, aunque supongo que ya lo sabes de sobra.

Aunque la Alianza haya caído, la Casa Albrecht ha conservado su estatus.

Todo gracias a mi hermano. Es un buen chico; seguro que le irá bien en el Imperio.

Puede que el mundo haya cambiado, pero yo sigo siendo el mismo. La vida de los nobles no es para mí. Prefiero ser libre de hacer lo que me dé la gana.

No me sorprende la rapidez con la que la Alianza se ha retirado al ver que no tenía opciones de vencer.

Dada su absoluta falta de solidaridad, no había otra conclusión posible.

Lo que importa es que una de las fuerzas que se nos oponían ha caído. ¡La victoria se acerca!

Nos enfrentamos a gente a la que conocemos de la Academia de Oficiales.

Supongo que es lo normal en las guerras, pero no me gusta nada.

Me hace sentir tan... Será mejor que piense en cualquier otra cosa.

No debo lealtad ni al Imperio ni a quien lo dirige.

Me limito a cumplir el acuerdo. No tengo otro motivo para estar aquí.

¿Qué tal va todo, profesor/profesora? ¿La salud bien? Y, lo más importante, ¿los negocios también?

Ojalá pudiera quedarme a escuchar tus aventuras, pero tengo mucho trabajo. Y el trabajo es dinero, así que, si me disculpas...

¿Qué tal va todo, profesor/profesora? ¿La salud bien? Y, lo más importante, ¿los negocios también?

Ojalá pudiera quedarme a escuchar tus aventuras, pero tengo mucho trabajo. Y el trabajo es dinero, así que, si me disculpas...

La Alianza ya no existe... Parece imposible.

Pero me consta que los mercaderes de Derdriu se manejan muy bien en tiempos de crisis. Estoy segura de que saldrán adelante.

Los ánimos están bastante crispados en todas partes. No conozco a un solo compañero de gremio que no haya visto amenazado su modo de vida...

Solo espero que las cosas vuelvan a su cauce lo antes posible. La gente necesita algo más que mis increíbles ofertas para volver a sonreír.

¿Cómo dices? ¿Quieres que te hable del Abismo?...

Se trata de unos vestigios subterráneos que yacen bajo Garreg Mach. Eso es el Abismo.

Hay gente que ha encontrado ahí su hogar. Cada cual tendrá sus motivos y su historia...

pero solo los mercaderes más osados se atreverían a aventurarse en un lugar así. Si te vale mi consejo, sugiero que también lo evites tú.

Escucha. Hay novedades en el puesto...

La Alianza pertenece al pasado. Caramba... Qué rápido se suceden los acontecimientos. ¡Incluso a mí me cuesta mantenerme al día!

Me pregunto si también habrá cambios en el Abismo. El cambio genera incertidumbre, y la incertidumbre conduce al... ¿cambio? Yo qué sé, solo soy centinela.

Tengo un juego para ti: un amigo mío dice que en el Abismo hay el doble de mujeres que de hombres. ¿Crees que tiene razón?

¡Premio para el caballero/la señora! Toma, te lo has ganado.

Qué va... ¿Pero tú sabes contar? Mira a tu alrededor.

(...)

Ese maldito príncipe... Parece que aquí ya no pinto nada.

No importa... Si se me vuelve a presentar otra ocasión, no me andaré con sutilezas...

Por favor, no le digas a nadie que me has visto aquí. Me estoy escondiendo del ejército.

No podía soportar más la violencia de la guerra. Tenía que escapar... Pero, ahora que he desertado, no puedo volver a casa.

Justicia, ideales... ¿Qué importa eso si mueres? Yo solo quiero vivir. ¿Acaso tiene algo de malo?

Conque tú eres el hijo/la hija de Jeralt... Te pareces mucho a tu madre.

Por ciertos motivos, he tenido que ausentarme del monasterio durante un tiempo.

¿Puedo pedirte un favor?

¿Te importaría poner unas flores en la tumba de tu madre?

Estoy seguro de que le encantaría que fueses tú quien se las llevases.

Muchas gracias. Esas eran justamente sus flores favoritas.

Ya puedo dormir en paz.

Ahora debo irme. Prométeme que te cuidarás.

Pórtate bien con Jeralt. Es lo que ella desearía.